Aquí estamos situados a 17 km de Villaviciosa y a unos 14 km de Gijón. Es un pueblo costero con bonitos acantilados que se descuelgan sobre el mar Cantábrico. Es interesante señalar las canteras de piedra arenisca.
En la desembocadura del río España se encuentra la playa del mismo nombre. En ella hay servicio de salvamento durante el verano, duchas, aparcamiento de pago, un camping, un par de restaurantes y un bar de copas donde disfrutar de preciosos atardeceres.
Ipanema es bonito restaurante a pie de playa, con variedad de platos y música
La playa de España es de buena arena, pero el acceso está lleno de piedras que el mar durante el invierno remueve y cambia. Son piedras grandes redondeadas que no complican el acceso al mar en marea baja, cuando la playa está más bonita. Es buen lugar para el surf, durante todo el año hay gente cogiendo olas.
Quintes está formado por los barrios de Santa Ana y Medio, y la zona de Cimadevilla. Ocupa una rasa litoral limitada por el valle del río y partida en dos por la “Riega de Escalera”. Tiene una extensión aproximada de cinco kilómetros cuadrados y unos quinientos habitantes, cifra que crece desde que la autovía facilitó el acceso y llega a duplicarse en verano y épocas de vacaciones.
La zona es en general llana, ideal para la bici, rodeada de prados, pomaradas (terrenos de manzanos) y zonas de cultivo. Cerca del río España hay bosques de eucaliptos, laureles, castaños, robles y avellanos, helechos, tojos y zarzas. Las zonas más cercanas a la playa son más pendientes, por eso la subida de la playa es dura a pie o en bicicleta.
La fauna es la típica de una zona costera con aves marinas: gaviotas, halcones, golondrinas, tordos, arceas, estorninos... y en los bosques hay comadrejas, ardillas, jabalíes y zorros. Las vacas de raza "asturiana de los valles", pastan a sus anchas y miran curiosas a los paseantes.
Respecto a la comida, fabes, pescados y mariscos son la base de la gastronomía típica de la zona. La fabada, fabes con almejas, los oricios, llámpares (en primavera de celebra el Festival Gastronómico de la Llámpara), andaricas, centollos o lubinas, son platos que se pueden encontrar en cualquier restaurante, siempre acompañados de sidra de la zona.
Las fiestas de Santa Ana se celebran el 26, 27 y 28 de julio, son divertidísimas y lo más importante del verano. El 20 de enero hay la fiesta en honor de San Fabián y San Sebastián, los patronos del pueblo.